Según el RACE, 9 de cada 10 conductores no conoce ninguna norma de seguridad para el uso de navegadores en carretera y sólo 1 de cada 4 ha recibido algún tipo de norma sobre su uso.  Hay dos puntos que resultan fundamentales para la seguridad: Familiarizarse con el navegador antes de conducir y nunca hacer uso del mismo mientras se está conduciendo. Y es que el navegador tiene innumerables ventajas: reduce el estrés y aumenta la seguridad pues un conductor perdido tiene más riesgo de accidentes, sin olvidar el ahorro de carburante. Con todo ello, hay una serie de consejos que nos pueden resultar muy útiles a la hora de utilizar correctamente el navegador:

1.- Nunca dejarlo encendido, puede agotar la batería

2.- Probarlo siempre antes en zonas conocidas y por las que sepamos guiarnos.

3.- Utilice siempre el sistema de voz, de manera que no haya que apartar la vista de la carretera

4.- Nunca manipularlo mientras conducimos y siempre, dar las instrucciones precisas parados en un lugar seguro

5.- Activar la visualización de velocidad, para que nos avise cuando la rebasamos, evitando accidentes y multas

6.- Actualizar permanentemente la cartografía y los puntos de interés

7.- Colocar el navegador, preferentemente en la parte central del salpicadero y asegurarse que no hay reflejos por el sol, que el cable no interfiere en los movimientos y que no se cubre ninguna visualización necesaria del vehículo.

8.- Tener cuidado de no colocarlo en el lugar del airbag, pues podría salir despedido contra el conductor.